La Nueva Escuela Mexicana

La Nueva Escuela Mexicana

The New Mexican School

Rosa Ángel Mena Martínez
Catedrática del CESE
Correo: ros.mena@cese.edu.mx

Resumen:

La sociedad del siglo XXI cambia en todos los sentidos. La educación es un claro ejemplo de renovación para que esta responda a las necesidades regionales, estatales, nacionales e internacionales. Las políticas educativas deben reajustarse a necesidades estructurales que se van presentando para ofrecer a los educandos mejores oportunidades. Al observar los cambios históricos que se han llevado a cabo en el país, es necesario mencionar que en 1970 hubo una primera reforma educativa que pretendía mejorar y expandir la educación primaria para dar continuidad al trabajo realizado por Jaime Torres Bodet en 1959. En la década de 1980, hubo una modificación a cargo de Fernando Solana Morales, quien encontró en el país un problema educativo: seis millones de analfabetas. Para 1992, llegó una reforma que se sustenta en el Acuerdo Nacional para la Modernización de la Educación Básica (ANMEB). Para 2011, se llevó a cabo la Reforma Integral de Educación Básica (RIEB) con el propósito de consolidar una ruta propia y pertinente para elevar la calidad educativa y favorecer la articulación en el diseño y desarrollo del currículo para la formación de los alumnos de preescolar, primaria y secundaria. Llegamos a la Reforma Educativa del 2017, que cimentaba el futuro de México en darles a los niños y jóvenes las herramientas necesarias para triunfar y lograr así que la nación sea próspera, justa y libre. En el 2018, la educación tomó otro rumbo debido a que llegó al Gobierno una corriente política distinta; con ello fue necesario comenzar a gestar una nueva reforma educativa, que se concretó con la Nueva Escuela Mexicana.

Palabras clave: Educación, periodos, políticas, reforma, educación básica, pública, currículo, formación integral, campo formativo, plan y programas.

Abstract

The society of the 21st century changes in every way, education is a clear example of renewal so that it responds to regional, state, national and international needs. Educational policies must be readjusted to structural needs that arise to offer students better opportunities. When observing the historical changes that have taken place in the country, it is necessary to mention that in 1970 there was a first Educational Reform, which sought to improve and expand primary education, to give continuity to the work carried out by Jaime Torres Bodet in 1959. In In the 1980s, there was a modification by Fernando Solana Morales, who found an educational problem in the country, in which there were six million illiterates. By 1992, a reform arrived that is based on the National Agreement for the Modernization of Basic Education (ANMEB). For 2011, the Integral Reform of Basic Education (RIEB) was carried out with the purpose of consolidating its own and relevant path to raise the educational quality and favor the articulation in the design and development of the curriculum for the training of preschool students. , primary school and high school. We arrived at the Educational Reform of 2017, which cemented the future of Mexico by giving children and young people the necessary tools to succeed and thus make the nation prosperous, fair and free. In 2018, education took another course because a different political current came to the Government; With this, it was necessary to begin to develop a new Educational Reform, which materialized with the New Mexican School.

Keywords: Education, policies, reform, basic, public education, curriculum, comprehensive training, training field, plan and programs.

La sociedad del siglo XXI cambia a pasos agigantados en todos los sentidos; esos cambios implican realizar ajustes que respondan a los requerimientos para satisfacer las necesidades de las personas.

Así como la economía constantemente se ajusta a estándares políticos nuevos, la sociedad también se ajusta a nuevos requerimientos; desde las construcciones o la forma de confeccionar ropa, todo se va modificando según las necesidades que se vayan presentando.

La educación es un claro ejemplo de renovación, por lo que es necesario considerar modificaciones estructurales para que esta responda a las necesidades regionales, estatales, nacionales e internacionales.

Considerar que un elemento como la educación se mantenga estático durante largos periodos es asumir que no hay evolución en las construcciones cognitivas sociales; es establecer que las diferentes generaciones que conforman una sociedad están determinadas por las mismas condiciones, contextos o modelos de aprendizaje.

A su vez, las políticas educativas deben reajustarse a necesidades estructurales que se van presentando para ofrecer a los educandos mejores oportunidades para poderse desarrollar dentro de una sociedad que exige de las personas mejor conocimientos de sus contextos para resolver las problemáticas a las que se enfrenten.

El desarrollo de las políticas públicas en variados campos permite fijar indicadores y conocimiento sobre el papel del Gobierno y su compromiso con la ciudadanía, a la vez que permite identificar el ritmo de apropiación de lo público y del derecho por parte de las comunidades a través de sus propios modos de cooperación. En consecuencia, en una localidad, región o país, cuyo eje de participación directa de las colectividades es bajo, el éxito rotundo de las políticas públicas es incierto, pues este quedará en manos de la sapiencia de los expertos o representantes, así como la responsabilidad y garantías del Gobierno a través de la eficacia burocrática (Herrera Morales, 2022).

Al observar los cambios históricos que se han llevado a cabo en el país, es necesario mencionar que en 1970 hubo una primera reforma educativa, que pretendía mejorar y expandir la educación primaria, para dar continuidad al trabajo realizado por Jaime Torres Bodet en 1959, con su Plan de 11 años, enfocándose en una educación democrática, centrada en el desarrollo.

En este sentido, los planes y programas de estudio se desarrollaron con base en la teoría sociocultural, la cual dio paso a la enseñanza por áreas ( Español, Matemáticas, Ciencias Sociales, Ciencias Naturales, Educación Artística, Física y Tecnológica).

Este cambio implicó modificaciones en la organización de los contenidos, en el enfoque de cada una de las áreas y en la propuesta didáctica que se llevaría a cabo.

Se trataba de producir nuevos individuos, participativos y entrenados, reflexivos y críticos, en sustitución de los niños sujetos a la autoridad patriarcal, de la familia y del Estado, para incorporarlos a las tareas de la sociedad administrada (González Villarreal, 2018).

En la década de los 80, hubo una modificación a cargo de Fernando Solana Morales, quien encontró en el país un problema educativo de seis millones de analfabetas. Por tanto, su principal preocupación fue crear las condiciones necesarias para que esta población pudiera solucionar sus problemas educativos.

Con el fin de subsanar el analfabetismo y dar  seguimiento, creó dos instituciones: el Colegio Nacional de Educación Profesional Técnica (CONALEP) y el Instituto Nacional para la Educación de los Adultos (INEA).

Para 1992, llegó una reforma que se sustenta en el Acuerdo Nacional para la Modernización de la Educación Básica (ANMEB), cuyo fin era descentralizar la educación y generar modificaciones a los planes de estudio de educación primaria y secundaria, para otorgar la administración de recursos humanos, técnicos y materiales a las entidades federativas.

Al ANMEB se le conoce como el “acuerdo de las tres erres”, ya que estableció tres grandes líneas de política pública con el propósito de impulsar una educación básica para todos, de calidad y con equidad. Las líneas fueron la reorganización del sistema educativo nacional, la reformulación de contenidos y materiales educativos y la revaloración de la función magisterial (Zorrilla, 2008).

Se regresó a la organización por asignaturas y se le otorgó la obligatoriedad al nivel primaria y secundaria. Todo ello bajo el sustento de la promulgación de la Ley General de Educación.

En el año 2002, se realizó una nueva reforma para hacer obligatorio el nivel educativo de preescolar.

Para 2011, se llevó a cabo la Reforma Integral de Educación Básica (RIEB) con el propósito de consolidar una ruta propia y pertinente para elevar la calidad educativa y favorecer la articulación en el diseño y desarrollo del currículo para la formación de los alumnos de preescolar, primaria y secundaria. Esta reforma coloca en el centro del acto educativo al alumno, al logro de los aprendizajes, a los estándares curriculares establecidos por periodos escolares, y favorece el desarrollo de competencias para permitir a los alumnos alcanzar el perfil de egreso de la educación básica (Secretaría de Educación Pública, SEP, 2011).

En esta reforma se pone énfasis en las competencias, estándares curriculares y los aprendizajes esperados, con el propósito de que los alumnos adquieran las herramientas necesarias para la aplicación de sus conocimientos y, de esta manera, puedan responder a las demandas actuales y en diferentes contextos.

De esta manera, llegamos a la Reforma Educativa del 2017, que cimentaba el futuro de México en darles a los niños y jóvenes las herramientas necesarias para triunfar y lograr así que la nación sea próspera, justa y libre.

A lo largo del siglo XX, el sistema educativo hizo realidad su utopía fundacional, que era llevar un maestro y una escuela hasta el último rincón del país. Hoy tenemos que ser más ambiciosos: además de garantizar el acceso a la educación, es necesario asegurar que esta sea de calidad y se convierta en una plataforma para que las niñas, niños y jóvenes de México triunfen en el siglo XXI. Debemos educar para la libertad y la creatividad (SEP, 2017).

En el 2018, la educación tomó otro rumbo debido a que llegó al Gobierno una corriente política distinta; con ello fue necesario comenzar a gestar una nueva Reforma Educativa, que se concretó con la Nueva Escuela Mexicana.Bajo la gestión del Secretario de Educación Pública, Esteban Moctezuma Barragán, y mediante el Acuerdo Educativo Nacional, se reorientó el sistema educativo nacional para poner en el centro de su esfuerzo el aprendizaje de niñas, niños, adolescentes y jóvenes (SEP, 2019).

El proyecto de la Nueva Escuela Mexicana tiene como sustento el desarrollarse en 23 años, tiempo durante el cual se reforzará la educación de los alumnos de nivel básico. Su propósito es brindar a los estudiantes una formación integral con un aprendizaje de excelencia, inclusivo, pluricultural, colaborativo y equitativo.

Asumiendo una base humanista para lograr avances en lo científico, tecnológico, social y cultural, se brindará al alumno el eje central del aprendizaje dentro de un contexto que aportará soluciones a problemáticas de su entorno.

Para la Nueva Escuela Mexicana no existen dos escuelas iguales y ninguna tiene un fin en sí misma; todas ellas están al servicio de sus comunidades y de la sociedad en su conjunto, por lo que la escuela se entiende como el espacio fundamental en el que se construye la igualdad para todas y todos (SEP, 2022).

Este nuevo plan propone la implementación de seis fases educativas, que estarán distribuidas durante la educación básica:

  • Fase 1: que corresponde de los 0 a los 3 años .
  • Fase 2: abarca los tres años de preescolar.
  • Fase 3: la conforma primero y segundo de primaria. 
  • Fase 4: la conforman tercero y cuarto de primaria. 
  • Fase 5: la conforman quinto y sexto de primaria.
  • Fase 6: está conformada por los tres años educativos de secundaria.

La Nueva Escuela Mexicana propone la organización curricular en campos formativos: lenguajes, saberes y pensamiento científico; ética, naturaleza y sociedad; de lo humano y lo comunitario.

El campo formativo de lenguajes congrega saberes de las disciplinas vinculadas con el aprendizaje del español, de lenguas indígenas, de lenguas extranjeras, la Lengua de Señas Mexicana y la aproximación al arte como lenguaje.

El campo formativo de saberes y pensamiento científico privilegia el desarrollo de una actitud científica, fundada en una forma de cuestionar, indagar, pensar e interpretar los fenómenos y procesos naturales y sociales en distintos contextos, desde la perspectiva de la ciencia escolar. Está integrado por Matemáticas, Biología, Física, Química y Tecnología.

El campo formativo de ética, naturaleza y sociedad favorece la comprensión histórica de los cambios y permanencias que han vivido las sociedades en el mundo a través del tiempo y el espacio, así como la creación de principios éticos que garantizan la convivencia entre personas y pueblos, basados en la dignidad humana, derechos humanos, cultura de la paz, valores y principios democráticos. Lo integran Formación Cívica y Ética, Historia y Geografía.

El campo formativo de lo humano y lo comunitario reconoce la vida humana como proceso continuo de construcción personal, interacción social y participación efectiva para lograr una vida digna. A este campo lo conforman Educación Física, Tutoría y Educación Socioemocional.

Cada campo formativo está integrado por Descripción, Contenidos, Diálogos, Progresiones de aprendizaje, Orientaciones didácticas y Sugerencias de evaluación.

  • Descripción: son las ideas centrales y el sentido que orienta el planteamiento integrado de las disciplinas que lo conforman.
  • Contenidos: son los objetos de estudios y el alcanzar los aprendizajes para que el estudiantado se desenvuelva en los distintos ámbitos de la vida y se atiendan las necesidades sociales mencionadas en las finalidades educativas.
  • Diálogos: son el medio para que el estudiantado estructure los conocimientos de cada uno de los campos formativos, estableciendo comunicación. Estos establecen los aspectos para organizar la planeación, el seguimiento y la evaluación de los contenidos.
  • Progresiones de aprendizaje: sirven para ubicar los niveles de aproximación a los saberes en un momento de desarrollo en el que se encuentren, precisando los conocimientos, habilidades, valores y saberes que llevan a un proceso formativo.
  • Orientaciones didácticas: son propuestas que buscan detonar la creatividad en la práctica e intervención docente de carácter conceptual, procedimental y actitudinal. Se proponen actividades y estrategias, formas de organización del trabajo y gestionar de manera adecuada el uso del tiempo.
  • Sugerencias de evaluación: con el fin de identificar progresos de aprendizaje, implican generar evidencias cualitativas y cuantitativas de aprendizaje individual y en equipo.

El plan y los programas de estudio de la Nueva Escuela Mexicana plantean una transversalidad entre todos los campos formativos por medio de sus ejes articuladores: inclusión, pensamiento crítico, interculturalidad crítica, igualdad de género, fomento a la lectura y escritura, educación estética y vida saludable.

  • Inclusión: implica que las niñas, niños y adolescentes se formen en espacios educativos desde una perspectiva decolonial.
  • Pensamiento crítico: se entiende como la recuperación del otro desde la diversidad, dentro de la democracia y la justicia social.
  • Interculturalidad crítica: se refiere a sujetos, comunidades e identidades lingüísticas, culturales, sociales y territoriales en su diversidad, que interactúan, dialogan, se interpelan y producen entre sí diferentes realidades en un marco de relaciones asimétricas.
  • Igualdad de género: supone una formación en que niñas, niños y adolescentes puedan comprender que la igualdad de género es una condición histórica.
  • Vida saludable: que los alumnos comprendan que el cuidado personal tiene efectos positivos en otras personas y viceversa, y que una vida saludable se vincula con el medio ambiente, pues todos convivimos en el planeta.
  • Fomento a la lectura y escritura: la finalidad es lograr comunidades de lectores que se acerquen a los textos para comprender algo de su mundo cotidiano.
  • Artes y experiencias estéticas: buscan la exploración sensible del mundo al reconocer y recuperar las experiencias artísticas y estéticas.

La conformación de este nuevo plan y de programas de estudio que significa la Nueva Escuela Mexicana trata de subsanar las adversidades que deben enfrentar los alumnos en un mundo en constante cambio, donde lo que estaba determinado se modifica día a día, por lo que es necesario dotar a los alumnos de herramientas para desarrollarse dentro un entorno que requiere de una comprensión integral que permita sensibilizar al alumno para aportar a la sociedad.

Referencias

  1. González Villarreal, R. (2018). La reforma educativa en México: 1970-1976. Espacio, tiempo y educación, 5(1), 95-118.  DOI: http://dx.doi.org/10.14516/ete.214
  2. Herrera Morales, F. (2022). Del marco cognitivo de las políticas públicas a la construcción de paz. Revista de Antropología y Sociología, 11-24. DOI: 10.17151/rasv.2023.25.1.2
  3. Secretaría de Educación Pública [SEP]. (2011). Plan de Estudios 2011. Secretaría de Educación Pública.
  4. Secretaría de Educación Pública [SEP]. (2017). Aprendizajes Clave para la educación Integral. Secretaría de Educación Pública.
  5. Secretaría de Educación Pública [SEP]. (2019, 2 de diciembre). Boletín No. 238.  
  6. Secretaría de Educación Pública [SEP]. (2022, 28 de mayo). [Plan de estudios para la educación preescolar, primaria y secundaria]. http://gestion.cte.sep.gob.mx/insumos/php/docs/sesion6/Plan_de_Estudios_para_la_Educacion_Preescolar_Primaria_y_Secundaria.pdf
  7. Zorrilla, M. (2008). Reforma educativa en México. Descentralización y nuevos actores. Revista Electrónica Sinéctica, 1-30.